Mucho Betis y mucho Valencia
Un partido cargado de momentos de incertidumbre, tensión e incluso drama, que duro más de dos horas y que se decidió en la tanda de penaltis, donde el Club verdiblanco logró su tercera copa tras un fallo de Musah.
Desde que comenzó a sonar el himno de España, la final de la Copa del Rey se convirtió en el partido más hermoso de los últimos años, con un espíritu festivo por parte de los aficionados de ambos equipos que contagio a todas las personas que lo vieron a través de los diferentes medios de comunicación.
Los jugadores de ambos equipos se caracterizaron por la ilusión, honor, pasión, esfuerzo, amistad y generoso fútbol con la que se enfrentaron durante todo el partido.
Y lo mejor de todo, sin la presencia de Pedro Sánchez, presidente de España.
El Betis, arranco el partido con su sinfonía de memoria y encontrado las costuras al Valencia. Se sintió tan superior que cayó en la trampa de dar por muerto al Valencia, que con tres pases les bastó para empatar el partido.
Con tres jugadores fue suficiente. La buscó Carlos Soler en banda, filtró un pase que nadie en el estadio imaginó a Ilaix para que dejara solo a Hugo Duro ante Bravo. Era imposible que fallara el hombre talismán de las últimas copas valencianistas.
Joaquín, el capitán del Betis, con más de 40 años, se convierte en leyenda al ser el primer futbolista de la historia en ganar dos títulos con su club y el futbolista de mayor edad en disputar una Copa del Rey, atreviéndose incluso a lanzar un penalti que acabó en la red.
El capitán alzo la Copa, en casa, en un estadio rendido por su gran partido en el que su rival lo miró de tú a tú hasta la tanda de penaltis.
Fuentes:
https://www.elmundo.es/deportes/futbol/copa-del-rey/2022/04/24/62646db6e4d4d81a5e8b45b1.html
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